domingo, 31 de marzo de 2019

VOLVER A ABRIL


Vuelvo a abril. Regreso así al silencio de palabras ahogadas, contraluz mortecino de una casa que nunca fue la mía. Revivo aquella tarde sonámbula y terrible de pasos sin motivo y sin destino, aquella tarde eterna de un alma intermitente que vivía entre los sueños y la inminente pérdida y que yo imaginé, cuando la vida era un amor constante dormido en unos ojos que, aún sin poder ver ya, me miran compasivos cuando creen que no miro, apenas un recurso de poeta arrinconado. La luz de aquel abril me sigue acompañando sin remedio y al final, la metáfora, ese pispás de folios y cuadrículas, ese destello cóncavo de encuentros y de hallazgos, se hizo carne presente, inaprensible y triste y fría y lejana. El tiempo, sin embargo, inconmovible y terco, cumpliendo con su espíritu, siguió siendo. Y abril, a su costado, también siguió su rumbo por el aire como presencia cierta de un dolor inconsútil, permanente. Yo no sé en qué momento del trayecto descansó entre mis manos y escrutó sus vacíos. Yo no sé en qué momento abril dejó de ser un mes y pasó a ser la sombra de la melancolía, el paradigma exacto de mi huida hacia adentro. No sé por qué me asalta y me conmueve hasta destartalar los goznes de mi alma. No sé por qué lo siento como una emoción ácrata. Porque no sé qué es. Ni siquiera si existe fuera del calendario. ¿Un subterfugio absurdo para reconocerme mientras sueño, un complejo de culpa por intentos estériles, una excusa poética para justificar la lejanía ficticia con la que miro el mundo?  «Está anidando abril en mi ventana», canté como un presagio mucho antes del dolor que abril me trajo. Pero, a partir de ahí, dejó su impronta para siempre en la ventana absorta de mis ojos. Y ahí sigue atormentándome mientras me da la vida mostrándome quién soy cuando, en silencio, recupero mis pasos.

 Vuelvo a abril para encontrarme con el niño que fui y me espera escondido en las arrugas que viven en mis manos. Renuevo en cada encuentro la alegría de recorrer el tiempo que ya ha sido, de dominarlo a mi antojo saltando por los años sin sentir la crueldad de su inclemencia. Porque abril es también la alcancía donde guardo ilusiones de entonces, donde atesoro vida que fue mía y revivo con la misma inocencia irresponsable de la que no despierto. Y deambulo sonámbulo, siempre por el pasillo con vocación de útero que guardo en el almario, rectificando errores y ‘desfaciendo entuertos’ creyéndome un fantasma omnipotente capaz de revertir lo irreversible. Me siento el montador de una película hecha de los recortes que el olvido no pudo censurar. Una escena tras otra de caricias y besos sin orden ni concierto. Cinema Paradiso de mi vida, tal vez Benjamin Button de ida y vuelta. Regreso cuando marcho yéndome cuando vuelvo. Como tiene que ser si juegas a vivir de sentimientos.

Vuelvo a abril, como se vuelve siempre al amor. La voz quebrada y áspera de Roberto ‘Polaco’ Goyeneche me llena a borbotones los oídos. Él le cantaba al sur y yo aprovecho el ritmo del tango de Piazzolla y hago de abril el ámbito de un constante regreso a los encuentros que ya no serán más. Abril es el refugio de mis sueños. Del brazo de Jesús Delgado Valhondo renuevo en este pálpito «el milagro de huir donde volvía». Y deambulo con él por la quimera de aquel tiempo de siempre y de la vida. Me aferro de su mano tratando de entender qué dicen los silencios, qué anuncian las ausencias, qué preguntan mis muertos. Se mezclan los momentos, atropelladamente, y mis ojos, entonces, duermen en un ayer que es mi mañana. Se confunden los tiempos. Se confunden las penas entre un sinfín de voces y de risas, de nombres, de misterios. Por encima del campo y de los cerros, del paisaje que la ventana enmarca delante de mis ojos, hay una luz distinta que arrulla a la mañana como una madre triste que meciera una cuna vacía y desheredada, ausente de futuro. La cuna en la que yacen mis recuerdos. La cuna en la que duermo y me despierto tratando de atrapar un fulgor repentino que se cuele, furtivo y despistado, por entre las rendijas del silencio.


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