sábado, 19 de septiembre de 2009

APUNTES DEL NATURAL

Indispensable la lectura del artículo que hoy, en "El país", publican al jubilado Ibarra (¿?). Por un lado, resulta curioso ver cómo estos franquistas reciclados de Prisa patalean, desde hace días, cuando les quitan la mamandurria del lío de la TDT de pago para dársela al injerto de empresario-troskista, esa especie de nectarina izquierdosa. Y, por otro, ¡bendito sea Dios!, cómo echan mano de este apolillado para que defienda su casposo blasón y les rellene una página. En fin, no tiene desperdicio leer cómo este carcelero de la libertad de expresión en Extremadura durante tantos años, se nos aparece ahora transmutado, por arte de birlibirloque, en conspicuo paladín de la misma, agarra a ZP como monigote y lo transforma en el alter ego de su cinismo. Al final, viene a decir que los culpables del silencio son los amordazados que se callan a cambio de una canonjía. Éste pájaro, que nos toma por imbéciles, circunscribe el silencio impuesto al círculo de sus imbéciles. Y, de paso, al círculo de los imbéciles de ZP. O sea, que aquí, por vía de nómina, todos contentos: consejeros, ministros, asesores, diputados, correligionarios... ¡Anda, mira qué listo! Él, tan pancho, sentado en la última fila del autobús de los pancistas, desmemoriado como un pez estúpido, tratando de que nosotros, el resto, seamos también peces estúpidos. Y los callados, esclavos de su avaricia. Y, repito, nosotros, el resto, viendo pasar los carros del estiércol mientras el tipo pretende que digamos que la mierda huele a incienso.

Este tío, cuando ejercía de liberticida, hacía alarde de una soberbia ilimitada. Ahora, en su retiro subvencionado, la enguachina con una buena dosis de desfachatez. Y, digo yo: la lastimosa adoración que le profesa su delfín, cuyo libro de cabecera es el engendro de los cristales rotos, ¿es por convencimiento o, antes al contrario, forma parte el sucesor a título de sucesor de la cofradía de silentes estómagos agradecidos? Juiciosa pregunta, que dirían los inefables Hernández y Fernández. Estaremos atentos, digo si la hubiere, a la próxima excrecencia del santón lenguaraz. Mientras llega, si llegare, yo estaré en un sin vivir. Sin duda alguna.

jueves, 17 de septiembre de 2009

APUNTES DEL NATURAL

- Ayer leí en un digital que a un condenado a muerte en Estados Unidos le aplazaron la ejecución. Parece ser que el matarife fue incapaz de encontrar la vena en el momento de inyectarle la dosis letal. ¿Torpeza del ejecutante? ¿Nervios? No sé. Al pobre desgraciado lo devolvieron a la celda con el brazo agujereado y, en una semana, volverá a repetir el rito de encararse con su muerte. No sé si rezará para que el verdugo acierte de una vez. Debe de ser horripilante ser la víctima propiciatoria de esta macabra ceremonia y seguir vivo. La sordidez, en noticias como ésta, se desparrama como una pringue hedionda. ¡Qué tenebrosa la oscuridad de la luz!

- El toro de la Vega sigue también con su ritual de muerte. No paramos. Qué obsesión de sangre derramada. Los trogloditas lancean al animal bajo la égida de la tradición. Los veo en televisión sudorosos, sucios, babeando que la masacre es el espíritu de Tordesillas. Regodeándose en la saña. Bestias modorras, iluminadas, brutas.

- Y mientras tanto, en el Olimpo todo sigue igual. El cristobita bobo, el de las cejas refulgentes, este pingüino con ínfulas de gaviota, elevándonos a las más altas cotas de la miseria. En fin, corazón mío: se acaba este 17 de setiembre y, quizás, continúo.

viernes, 11 de septiembre de 2009

APUNTES DEL NATURAL

Puta la madre, puta la hija, puta la manta que las cobija. Pues eso.